Lugares visitados:
Pedra do Guardião
La primera parada del circuito, que comienza en la entrada del Parque Estatal de la Costa do Sol, tiene lugar en un paisaje lleno de paredes e inmensos acantilados con el mar azul de fondo. Allí, la atracción principal es la Pedra do Guardião (Piedra del Guardián), una formación rocosa caprichosamente tallada que hace referencia al rostro de un hombre. Punto de referencia geológico, el entorno invita a explorar las rocas hasta llegar al «respiradero», una especie de mirador entre las rocas con sombra y viento. Allí, la orden es sentarse un rato, relajarse y contemplar.
Piscinas naturales
Los «charcos» aparecen durante la marea baja, en medio de las formaciones rocosas de la región, y son perfectos para bañarse y realizar registros fotográficos. Dependiendo de la altura de las olas, se forman cascadas saladas entre las rocas, proporcionando un espectáculo de inmensa belleza. Para bañarse, es necesario estar atento a las orientaciones para evitar los puntos sumergidos que cobijan a los erizos.
Praia dos Amores (Playa de Amores)
Encantadora y exclusiva, la playa alberga una pequeña franja de arena y ofrece sombra bajo los almendros.
Las losas sumergidas a pocos metros de la arena son aptas para bucear debido a los numerosos peces y tortugas que viven allí. Un paseo por las rocas conduce a la playa de Ferradurinha (opcional).