Me llamó mucho la atención este hotel porque tiene una evaluación muy alta y por ello decidí quedarme aquí, no sé qué tan confiables sean esos resultados, para mí lo único que vale la pena es la ubicación, está muy céntrico y del sótano sales directo al riverwalk, varios restaurantes alrededor y eso lo hace cómodo y conveniente. Está bien que preserven el edificio pero podrían hacer mucho más por el mobiliario de la habitación, son muebles viejos y los pasillos huelen como humedad. El desayuno básico y por la tarde ofrecen merienda como nachos, palomitas, hot dog, en fin muy promedio. Es un hotel que se llena y satura mucho, eso da la impresión de estar mal arreglado y sucio constantemente