Me ha gustado mucho el emplazamiento y la organización de los apartamento. Pero el hecho de tener que ir a recoger y entregar las llaves a un hotel bastante distante, perjudica al viajero. En cuanto al bus-naveta que potencialmente podía llevarte desde este hotel a la Residenia Cavour, es inexistente, por lo que se puede considerar como "publicidad engañosa".
Debo añadir que a pesar de estar en pleno centro, es muy silencioso ante los ruidos de la calle; en cambio, el del extractor del baño -constantemente en funcionamiento - es un hándicap para quien tenga el sueño ligero. Muy bien tener televisor en dormitorio y salon-cocina pero desde mi punto de vista sería mejor poder disponer de cafetera y plancha, así como de algún producto y medios para la limpieza, sobre todo cuando no solo se está un fin de semana.Pero lo peor es la altura del armario, a dónde no se llega sin subirse a una silla para alcanzar las perchas, con el consiguiente peligro de caídas.Hay procedimientos para resolver estas situaciones....