Hay algunos lugares de los que no puedes evitar enamorarte a primera vista, ¡y Cassis forma parte de ellos! Conduce hasta el cabo Canaille, el acantilado marítimo más alto de Europa, y disfruta de la vista panorámica de la bahía. Pase algo de tiempo libre en el encantador puerto pesquero de Cassis para almorzar (posibilidad de nadar o tomar el sol).
Posibilidad de unirse a un crucero para descubrir las Calanques (billete de crucero no incluido), los acantilados de piedra caliza que se sumergen en las cristalinas aguas azules del mar Mediterráneo y crean calas naturales (garras gruesas y rocosas que se asemejan a los fiordos noruegos y se asoman al mar).
En Aix-en-Provence, pasea por el famoso Cours Mirabeau, salpicado de refrescantes fuentes. Admira las mansiones privadas de los siglos XVII y XVIII. Tiempo libre antes de regresar a Marsella.