A las 8.30 nos dirigiremos hacia la zona de pesca para un fascinante recorrido por la costa, enriquecido con las historias y curiosidades narradas por el pescador que nos contará su trabajo y el arte de encontrar los peces. Parada la barca, aquí estamos pendiente de los labios del pescador que, procediendo a la recuperación de las redes dejadas en el agua el día anterior, nos mostrará este antiguo oficio entre anécdotas y curiosidad. Después de limpiarlas y recoger el pescado, disfrutaremos de una pausa de aproximadamente 2 horas y media para un baño refrescante en las aguas de Santa Lucía. Para el almuerzo, tendremos el placer de probar el frito del pescado del día, además de bruschette y una primera base de pescado con vino local, cerveza o anecdóticos (comida y una bebida incluidos en la cuota). Terminaremos nuestro día volviendo al puerto de salida hacia las 14.30, después de aproximadamente 6 horas de experiencia.