Navega por las bahías e islas protegidas que rodean Rockingham en busca de los casi 200 delfines que viven en la zona. Una vez que se den a conocer sus aletas dorsales de color gris plateado, vístete con un traje de neopreno, una máscara y un tubo de buceo para zambullirte en el agua y disfrutar de un momento perfecto para jugar con las marsopas.

Reúnase con su capitán y su tripulación y suba a bordo de un elegante barco de crucero en busca de delfines, y diríjase a las hermosas aguas costeras de Rockingham para avistar las manadas de marsopas que se encuentran en las numerosas bahías e islas. Una vez que se ve un delfín, el capitán apaga los motores (señal para los delfines de que la hora de jugar es inminente) y la tripulación te ayuda a ponerte el traje de neopreno completo, el tubo de buceo y la máscara.

Sumérgete en el agua a las órdenes del capitán y date cuenta de que estás rodeado de resbaladizos delfines grises y que el aire se llena de silbidos, salpicaduras y risas alegres. No hay trucos de por medio, ni tampoco hay que alimentarse: se trata simplemente de una interacción entre humanos y delfines en la naturaleza salvaje del océano.